El pasado 23 de abril, y ante 98 participantes se presentó con el equipo Banquemos el ex candidato a Vicepresidente de la Nación por Juntos por el Cambio.
Se conversaron los siguientes temas:
Acerca del cierre del Congreso y el gobierno por decreto. Hay que tener una actitud responsable en tanto que oposición, pero al cerrar el Congreso y el poder legislativo, se instaló el gobierno por DNU. Es necesario que estos DNU sean convertidos en leyes y que el Congreso sesiones. Los plazos para que los DNU sean aprobados por el Congreso ya vencieron (ver Régimen Legal de los Decretos de Necesidad y Urgencia, de delegación legislativa y de promulgación parcial de Leyes), ya que por ahora no hay control.
Crisis laboral y demonización de la economía. Más del 70 porciento de las pymes no pueden pagar salarios, y no pueden acceder a créditos. Deben tomar medidas de carácter impositivo como en Uruguay, donde la cuarentena es más flexible, ya que la gente necesita salir a trabajar. Deberíamos mirar los modelos uruguayos y el chilenos. La cuarentena puede seguir para quienes tienen un trabajo o un ingreso estable pero no para el resto, que es mayoría. Parálisis económica insostenible, imposible que los salarios se mantengan. Se calcula la pérdida de unos 300 mil empleos. El peligro es que la gente levante la cuarentena de motu propio, de forma desordenada y sin plan, sólo por la desesperación. Lo cierto es que el gobierno tiene un buen grupo de expertos sanitarios pero le falta el costado económico. Demonizan a la “economía”, infantilizando el discurso con una dicotomía absurda,como si la economía fuese un banquero malo y rapaz que se lleva la plata.
Peligro de la instalación del autoritarismo y de una forma de gobierno sin Congreso. En lo ideológico se nota la gravitación del kirchnerismo más duro en ejemplos como el nuevo impuesto a la riqueza. Si el congreso tarda mucho más en arrancar se puede instalar la idea de que si el Congreso desaparece en una crisis, su rol es innecesario, que puede no estar. En esta crisis no podemos dejar que el Congreso desaparezca. Hay una posición autoritaria que se ve en los medios de comunicación como C5N y una voluntad de hacer callar a las voces críticas. La desaparición del Congreso sería también contraproducente para el oficialismo mismo. Se pueden cambiar los reglamentos para poder legislar, lo importante es que este en el tablero para que esto se instale. La comisión de DNU tiene que reunirse, tenemos un deber como dirigentes políticos.
Vulnerabilidad de la clase media y de las PyMEs. Estamos ante una estrategia para llevar a la clase media por debajo de la línea de pobreza y que se viene un combo de reforma fiscal donde se están dando los condimentos para esto, es urgente que hagamos propuestas con las cámaras con protocolos de reactivación estrictos. Más del 60 por ciento de las empresas tienen cheques rebotados, y es muy posible que la ayuda de dos salarios mínimos no llegue a tiempo. Los sindicatos están callados pero negociando con los empresarios, la economía de Macri fue mala pero la van añorar, los sindicatos con Macri discutían salarios de 30 por ciento de aumento anual.
Autocrítica del PRO. El PRO tiene que hacerse una autocrítica sin inmolarse de por qué muchas de las políticas de gobierno que constituyeron grandes avances en transparencia institucional y mejoras no fueron correctamente comunicadas por altos funcionarios del gobierno. Se debería haber defendido y explicado comunicadas como corresponden con mayor fortaleza estas cuestiones que hubieran dado más votos en la última elección. Un ejemplo es el GDE (Gestión Documental Electrónica).
Estadísticas de la pandemia en Argentina. Pichetto tiene contacto con gente que las lleva estadísticas, y los informes que le envían son positivos, que no va a ocurrir la catástrofe que el gobierno prevé, los test están aumentando pero no tanto como en Chile. Lo que analizan también es la ocupación de la cama de terapia intensiva, esto no está ocurriendo, la ocupación de terapia es insignificante, el sistema probado de salud es complementario del sistema público y entre ambos es bueno hoy está ocupado en y un 5%. Tendencia a la baja.
Caso Cipolletti. Las medidas del intendente, tomadas de manera inconsulta y arbitraria, mantienen a la ciudad bloqueada. La clausura del Sanatorio Río Negro que fue dispuesta por el ministerio de Salud de la provincia luego de que se conociera que el personal había contraído coronavirus, es ridícula y va en contra de todas las prácticas internacioanles. Los hospitales no deben cerrar, sólo hay que hacer cumplir los protocolos.
Dificultad de hacer escuchar nuestra voz y que no nos amalgamen con la oposición delirante como Espert, etc. Los medios nos descalifican y nos sacan del aire, no nos dan espacio, pero quedan maneras de hacerse escuchar.
EQUIPO BANQUEMOS
Ciudadanos comprometidos con Juntos Por el Cambio
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