Luego de escuchar con asombro algunas expresiones de su parte y cito: “Hay un sector de la oposición "que tira piedras" en medio de la crisis por el coronavirus”, y viendo la insólita y autoritaria reacción posterior entre sus seguidores y militantes en las redes sociales, no puedo más que preguntarme:
Sr. Presidente ¿ignora o promueve esa persecución política de quienes tenemos una visión crítica sobre algunas de las acciones del gobierno que Ud. lidera? Se lo pregunto, sobre todo, porque no solo han aparecido numerosos grupos que se proponen “patrullar” las redes para rastrear, identificar y denunciar opositores, también porque somos muchos los que recibimos amenazas luego de sus declaraciones.
Con respecto a las noticias falsas que tanto lo preocupan Sr. Presidente ¿cómo valora Ud. las críticas que recibió cuando nos recomendó tomar un tecito para vencer al virus ya que supuestamente moriría a los 26 grados? Ya se sabe que esa fue una noticia falsa que Ud. mismo transmitió, entiendo desde su buena fe, a todos los argentinos. Recuerde también que fue su ministro de salud quien dijo que el virus “no funcionaba” en verano.
Sr. Presidente: ¿cómo vivió el reclamo para la suspensión de clases al que Ud. se resistió varios días? ¿Lo sintió como una pedrada impulsada por un sector de la oposición? Le recuerdo que al poco tiempo lo aceptó a contramano de la recomendación inicial que le había realizado su propio equipo de técnicos. También le puedo recordar cuando se le pidió en Enero que aumente los controles en el aeropuerto para quienes llegaban desde China ¿le parece ahora un pedido exagerado y fuera de lugar?
Sobre la denuncia mediática de sobreprecios en la compra de alimentos por parte del Ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, ¿cree también ahora Sr. Presidente que fue un ataque a piedrazos de un sector de la oposición que supuestamente construye noticias falsas?
Sr. Presidente, si su malestar es con los cacerolazos o ruidazos que surgieron en los últimos días, le cuento que fue una acción ciudadana (acorde y en regla con la cuarentena dictaminada) para llamar la atención sobre aspectos que no están siendo debidamente valorados en su gobierno. Por ejemplo, la falta de testeos masivos, como los realizados por los países que son modelo a la hora de enfrentar a la pandemia. Sin embargo, tanto Ud. como importantes dirigentes oficialistas, han señalado que estas acciones fueron impulsadas por trolls o referentes opositores, desconociendo el profundo carácter cívico y democrático de esas expresiones sociales.
Es por lo expuesto, Sr. Presidente, que no aceptamos las acusaciones de “tirar piedras” que le hizo a la oposición crítica por manifestarse ante hechos como los anteriormente mencionados. Y en ese sentido le pido que respete a los millones de argentinos que no lo acompañamos con el voto y, sin embargo, entendemos que hoy, el único enemigo es el Coronavid-19.
Sepa Ud. Sr. Presidente, que tendrá de mi parte, y de todas las personas contenidas por los valores que profesamos en Juntos Por El Cambio, todo el apoyo ante las acciones adecuadas que Ud. y su equipo decidan para enfrentar esta pandemia. Pero nuestro aporte más valioso será, sin duda, honrar la democracia marcándole, sin vueltas pero con todo respeto, cada vez que vaya por un camino equivocado o anime la división de los argentinos para conseguir un rédito político coyuntural.
Ricardo Raúl Benedetti Coordinador General Equipo Banquemos
La democracia es un pilar fundamental en cualquier sociedad, especialmente en tiempos de crisis como los que enfrentamos con la pandemia del COVID-19. La crítica constructiva, el diálogo abierto y el respeto mutuo son esenciales para superar desafíos y fortalecer la unidad nacional, sin importar las diferencias ideológicas.
En este contexto, cuidar de la salud física y mental de la población es tan importante como salvaguardar los derechos democráticos. Aquí es donde iniciativas como las ofrecidas por centros de bienestar y nutrición pueden ser una herramienta clave para mantener el equilibrio en estos tiempos difíciles. No solo promueven hábitos alimenticios saludables, sino que también contribuyen a mejorar la calidad de vida en un momento donde el estrés y la incertidumbre son comunes.
Además, implementar hábitos saludables puede ser una forma efectiva de afrontar los retos diarios. Por ejemplo, incorporar un plan de alimentación balanceada semanal ayuda a mantener la energía y el enfoque necesario para participar activamente en la construcción de una sociedad más fuerte y resiliente.
Es importante que tanto el gobierno como los ciudadanos trabajemos juntos, respetando las opiniones divergentes y encontrando puntos de acuerdo para superar esta crisis. La democracia se enriquece con el intercambio de ideas y con el respeto hacia quienes piensan diferente. Sólo así construiremos una sociedad más justa y unida frente a las adversidades.